Y lo hiciste, y te quedaste raquítico.
Y raquítico , el pescuezo estiraste.
Y arriba, soporífero ansiolítico,
solamente a "San para mi" ensalzaste.
Y que esperábamos si no conoces.
Con oír el son y apenas unas voces
de aquellos a quien debieras servir,
te habría cundido más escribir,
mucho más que unas tendencias escuetas
que justifican tus taimadas tretas.
Y las serpientes melladas, durmiendo.
Y los presentes, a cosas distintas.
Y las ignoradas gentes bebiendo,
y la corte sonriéndote la tinta
que justifica la puesta en escena
y adorna, lubricándote la cena
de invitados buenamente escogidos
a los que sin saber, te has ofrecido.
Entronizado tuerto rey de ciegos,
seguro, la orquesta ofreció más juego.
©Giliblogheces
©Giliblogheces
No hay comentarios:
Publicar un comentario